“Es una pasada, el comedor es alucinante. La Villa es muy pequeñita pero está todo en una bahía y las vistas desde la habitación son súper chulas. Es una locura ver a tantos deportistas de tantísimos países. Está todo pensado por y para los deportistas, nos cuídan un montón.”
La Selección Española Fenenina ganó el sábado a Argelia por un imponente resultado de 8-80, pero perdió en la mañana del domingo ante la actual campeona del mundo, Paises Bajos, por 24-63. Aún así, están en cuartos de final.
29 de agosto de 2021.-
El pasado 24 de agosto se inauguraban en Tokio los Juegos Paralímpicos y en su Villa Olímpica, además de las banderas nacionales de todos los países que compiten, “ondea” la de Tres Cantos. De ello se encarga Sara Revuelta, que no ha dudado en pasear la enseña de nuestra ciudad y exhibirla orgullosa en las calles y en su residencia durante los Juegos de Tokyo 2020.
La deportista tricantina forma parte de la Selección Española de Baloncesto en silla de ruedas y hace poco más de un mes, fue recibida en el Ayuntamiento por el alcalde, Jesús Moreno, la concejal de deportes, Montaserrat Teba, y otros miembros del equipo de gobierno.
Sara les aseguraba entonces que ella y sus 11 compañeros, han trabajado mucho para intentar volver con una medalla, y que en cualquier caso, iba a “vivir la experiencia de la forma más intensa que pueda”.
Dicho y hecho. Hoy mismo, después de darlo todo en uno de los encuentros que ha llevado a su equipo a estar en cuartos de final, Sara nos ha contado cómo está siendo su estancia en Tokyo. Cómo es la Villa Olímpica: “muy muy muy pequeñita, los paseos muy cortos, porque no podemos salir de aquí, pero la Villa es alucinante, está todo en una bahía, en un puerto” y cómo es el sitio en el que vive durante los Juegos: “comparto apartamento con otras cinco compañeras, cada una en una habitación. Yo tengo una habitación doble, enorme, con una terraza sólo para mi y las vistas desde la habitación son súper chulas”.
Sara nos cuenta que está encantada al coincidir con gente de tantos países y deportes: “es una locura, te encuentras incluso con gente de países que habías olvidado que existen. Y de tantos deportes porque estás acostumbrada a los europeos y mundiales, a encontrarte con gente de baloncesto en silla, pero no de todos los deportes, y la verdad es que es una auténtica locura”.
Además del corazón y los ojos, la organización de los Juegos paralímpicos también ha conseguido conquistar el estómago de Sara: “El comedor es alucinante, tenemos dos plantas de comedor, tenemos una parte de pasta y de pizza y otra zona de comida del mundo, tienes de todo: pollo, carne, verduras, arroz…una parte más japonesa, una parte de la India y una parte vegetariana.Y cosas sin gluten”.
Pero no todo va a ser relajarse y alimentarse, que a Tokyo se va sobre todo a competir, y Sara ha aprovechado para contarnos también cómo está siendo la competición: “es alucinante la organización que tienen, las pistas donde jugamos, la importancia que dan siempre al deportista ¿no?, todo está pensado por y para el deportista, nos cuidan un montón y los patrocinadores también”.
Sara termina su relato asegurando que está “viviéndolo a tope, disfrutando de cada día y disfrutando de cada día de los que nos quedan aquí”.
Aquí puedes escuchar a Sara Revuelta contando su experiencia en los Juegos Paralímpicos de Tokyo 2020:
El sábado 28, tras la histórica victoria contra Argelia -era la primera vez que la selección femenina ganaba un partido en unos juegos paralímpicos-, Sara aseguraba ante los medios que la clave estuvo en una defensa muy compacta y que eso les dio la seguridad para atacar con confianza y subir los porcentajes de tiro. Sin embargo, en la mañana -hora española- del domingo 29, el equipo sufría la derrota ante Países Bajos (24-63), actual campeona del mundo. Su próximo partido de cuartos de final, lo juegan contra la selección de Alemania.
Desde Tres Cantos seguiremos muy pendientes de Sara y sus compañeras, deseándoles el mejor resultado y la medalla que, junto a una experiencia vital y profesional única, merecen traerse desde Tokyo.